jueves, 18 de agosto de 2016

DIA 4. “Vale, vale, un saquico patatas”

Comenzamos el día haciendo las compras de materiales que necesitamos para poner en marcha nuestras actividades: balones de deportes, pinturas, blocks de dibujo, lanas, esterillas etc. Somos conscientes que esto no sería posible sin vuestra ayuda ¡GRACIAS! También aprovechamos una bobina de cable que encontramos en el camino y la echamos al maletero, estamos seguros que será de gran utilidad.
Llegamos a Sinatex y mientras algunos preparamos todo para comenzar, nuestro amigo Mohamed nos ayuda a anunciar por el campo el comienzo de las nuevas actividades.

Nos dividimos en dos grupos, unos comenzamos con las clases de deporte, en las que, durante la mañana, dividimos a los chavales por edades y adaptamos las sesiones a las necesidades e intereses de cada grupo de edad. Nos damos cuenta de lo acertada que es esta actividad para ellos/as, necesitan descargar energías, rabias y frustraciones acumuladas.

                                  Deporte a pleno sol

Al mismo tiempo, otro grupo comienza las tareas de construcción de mobiliario y decoración de la zona comunitaria del exterior del campo. Pronto se acercan niños, adolescentes y jóvenes, deseosos de colaborar y crear sus propios espacios. Todos ellos y ellas asumen las tareas que van surgiendo en la construcción. Observamos que tienen una gran necesidad de sentirse útiles, de ayudar, de trabajar.
Poco a poco, se va creando un clima en el que los chavales van cogiendo confianza con nosotros, los sentimos cercanos, y algunos de ellos empiezan a abrirse y comparten experiencias personales que nos llegan.
En todo momento se muestran participativos, abiertos y de buen humor, salvando pequeños enfrentamientos entre ellos…  Entre actividad y actividad, pasamos un rato con ellos, aprendemos muchas cosas y también les enseñamos otras. Les hace mucha gracia algunas de las expresiones que utilizamos. Hoy la frase del día entre los niños y adolescentes ha sido “Vale, vale, un saquico patatas”

    Construyendo la mesa del espacio comunitario


        Pequeños y adolescentes colaboran juntos

Por la tarde planteamos una sesión de deporte para mujeres. Tras conversar con muchas de ellas ayer por la tarde, lo que nos solicitan es una clase de Yoga. Muchas de estas familias que actualmente se encuentran en Sinatex, previamente estuvieron asentados en Idomeni, donde tuvieron la oportunidad de practicar este deporte, que por lo que hemos visto, les encanta. De hecho, nos ha sorprendido la asistencia de las mujeres a esta actividad. Habíamos previsto un grupo de 14 aproximadamente,  y este es el número de esterilla que hemos comprado esta mañana. Finalmente, se han superado nuestras expectativas y eso nos encanta. Casi no había espacio dentro de la tiend para que todas pudieran hacer los ejercicios con libertad.

Las mujeres están súper motivadas y por supuesto, han pedido continuar estos días con la actividad. También nos sorprende el estado físico que tiene muchas de ellas, dadas las condiciones de vida actuales y las diferentes experiencias que han vivido. Son mujeres fuertes y con agallas.
No podemos decir lo mismo de los hombres. La mayor parte del tiempo, lo pasan sentados en las zonas de sombra del campo. No participan en las actividades, ni en construcción, ni en clases de inglés, árabe y kurdo etc, que se imparten también para los adultos en la escuela.  Y lo que es peor, ¡ni siquiera se hacen cargo de sus hijos cuando las mujeres acuden a Yoga! Solo hemos visto a los hombres en la zona exterior del campo para jugar un partido de fútbol entre ellos.
Al finalizar la tarde, ha acudido al campo un grupo de voluntarios/as italianos, que también han realizado actividades con los niños, han colocado una red wifi y han estado pinchando música con alguno de los jóvenes del campo.

    Colaborando en la actividad de la ONG italiana

Acabamos el día exhaustos, se acusa mucho el estar todo el día expuestos al Sol. De camino a casa encontramos una tienda de sombrillas de playa, y decidimos comprar dos, para insertarlas en el centro de las mesas que estamos construyendo con las bobinas de cable.
Durante todo el viaje, tenemos la sensación que la vida nos va poniendo en nuestro camino lo que necesitamos en cada momento y también que la gente con la que nos topamos nos facilita y ayuda en lo que nos proponemos.

Ya en casa, descansamos y esperamos que se haga la hora de ir a buscar al aeropuerto a nuestra compi, que se incorpora con muchas ganas a esta experiencia.

Hasta la próxima!

PD: Os volvemos a dar las gracias por las aportaciones que siguen llegando diariamente. Después de varios días aqu,í tenemos claras cuáles son las necesidades a cubrir. El número de cuenta sigue activo, os lo refrescamos:ES44 14910001243000061435




                                    Reunión bajo el árbol

    Momentos de esparcimiento entre actividades




3 comentarios:

  1. Sois los mejores chicos!!! Cuanto amor para dar y cuantas buenas intenciones.

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  2. Sois los mejores chicos!!! Cuanto amor para dar y cuantas buenas intenciones.

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  3. La satisfacción que debéis sentir, lo dice todo. Ánimo chicos. Sois geniales.

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